Siempre me cuesta empezar una historia, una entrada en mi blog o hasta una conversación. Puedo tener toda la idea, pero no sé cómo comenzar. Las introducciones y los títulos no son lo mío y a veces son un obstáculo para hacer las cosas. Hace un tiempo que no escribo. Estoy como esperando que algo pase, no se qué, pero inconscientemente creo que algo mágicamente pasará. La semana que viene empiezo mis clases de pintura con mi mejor amiga. Ayer compré todos los materiales, excepto los lienzos, qué irónico. Espero que esas clases todos los martes saquen algo bueno de mí, que me inspiren o al menos me relajen. El lugar en donde se ven las clases es bastante bueno, está lleno de cuadros hermosos, con una buena iluminación y, por supuesto, lleno de gente que le gusta pintar. Sólo he ido una vez, pero me gustó bastante, aunque creo que debería estar en un mejor lugar que en frente de una calle. Estoy emocionada por empezar, hace tiempo que deseo pintar, pero como siempre, quiero que todo sea perfecto. No soporto que algo salga mal y odio ser así. Yo sé que en la vida no todo es perfecto, o mejor dicho, nada en la vida es perfecto. Me pongo nerviosa al pensar que no tengo ni idea de lo que pintaré por primera vez... Qué estupidez. También estoy nerviosa de no ser lo suficientemente buena. Todos se llenan la boca diciendo que yo dibujo bien, pero nunca he pintado en óleo y no estoy muy segura de mis habilidades para dibujar sin un ejemplo, sin una ayuda, un material de apoyo y sólo con un carboncillo y un pincel. Me da miedo, pena, verguenza, o no se qué, que después que todos digan esas cosas de mí no me vaya bien y mis cuadros sean horribles. El perfeccionismo.. un don y una maldición.


Jai.