enero 16, 2012

Eres mi extraño favorito.

7 de Enero del 2012.


Tú no me conoces, yo a ti tampoco. Nos hemos visto como dos o tres veces nada más, o al menos yo te he visto a tí. Casualmente acabo de verte, y ya deseo volverlo a hacer. Como siempre, todo fue muy rápido. Talvez el destino nos está haciendo una mala jugada y no quiere que nos conozcamos. Quizás tú no seas el indicado para mí, o yo no sea la indicada para ti. No lo sé, puede ser que me equivoque y pronto, después de tanto esperar, un día nos conozcamos. Lo único que sé es que, a pesar de ser un completo extraño para mí, eres uno muy especial. Sin saber siquiera tu nombre, la forma en que te ríes, en la que mojas tus labios para decir una frase, me estremese desde la cabeza hasta la punta del pie.
Eres diferente, eso se sabe con sólo verte. No por el físico, sino que, además de hermoso, eres un caballero. Pocos hombres saben cómo tratar a una mujer. No es que yo sepa cómo las tratas tú, sino que al ver cómo tratas a desconocidos, puedo imaginar cómo eres. Como el día que te ví en el puesto de frutas, con una gran sonrisa y un "Buenos días" le pediste a la señora Hortencia que te diera las mejores manzanas. Que tonta soy, ese día creí que me verías. Si sólo hubieras volteado a ver a la muchacha que elegía unas naranjas, me hubieras visto la cara de tonta que tenía y cómo me sonrojaba al verte. Hasta el señor Juan, del puesto de hortalizas, se dío cuenta de que te estaba mirando, qué vergüenza.

Ya estoy hablando de más, sólo te quería decir que eres mi extraño favorito y que espero que un día dejemos de ser extraños.

Una extraña.

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